*En español al final de la página*
After a few days having
a rest, one afternoon that Joseph passed by his office to check if Rivas had
gone looking for him ... it seemed that no, the investigator breathed with
relief. But, by the door, he found a note as if someone had slipped it under
the door.
"I hope
you're already recovered from your injuries, remember that you have a debt, I'm
still waiting for the book."
With doubts
about the authorship of the note, he decided that the best place to go was to
Professor Morgan Fletcher's studio, to clarify what debt existed ... because
they beat him up was not on his payroll ...
Cornelius paid a pair of bucks to Sloth for keeping an eye on Riva's house.
When he arrived to the studio, it was found that no one opened the door, with marks that it had been forced to access, after knocking on the next door, an old woman told him that Professor Fletcher was in the hospital, because two nights before he had begun shouting, as if suffering a nightmare, the doctors came and forced the door, after injecting tranquilizers to Morgan, they indicated that the man had fevers, and they took him to the hospital, and that she knew nothing else.
Given that
it seemed that the case was going down the drain, Cornellius decided that it
was best to try to access the studio and get paid the services provided, at
least with a whiskey that the old man probably kept somewhere ... After a
couple of attempts, he managed to enter the room.
He sneaked through the shelves without making
any noise, after about twenty minutes he found a bottle of brandy, to which he took
a swig, while he entertained looking over the books that the old man had on the
shelves of the room, the bookcase was most of the room... until he found an
invoice for several books among which the missing book was registered. It looked
like it had been bought in the Pitgilli bookstore ...
Cornellius went out of the studio with his bottle, a buck of dollars and the invoice
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Después de unos días de descanso, una tarde que Joseph se pasó por su oficina para comprobar si Rivas había ido en su busca... parecía que no, respiró aliviado el investigador. Pero junto a la puerta, encontró una nota como si alguien la hubiera deslizado bajo la puerta.
"Espero que ya estés recuperado de tus heridas, recuerda que tienes una deuda, aún sigo esperando el libro".
Mientras iba de camino, se puso en contacto con Sloth para que controlara la casa de Rivas.
Con dudas sobre la autoría de la nota, decidió que el mejor sitio a donde ir era al despacho del profesor Morgan Fletcher, y aclarar qué deuda existía... pues que le dieran una paliza no estaba en su nómina...
Cuando llegó, se encontró que nadie abría la puerta, con marcas de que se hubiera forzado para acceder, tras llamar a la puerta contigua una mujer entrada en años le comentó que el profesor Fletcher estaba en el hospital, pues dos noches antes había comenzado a gritar, como si sufriera una pesadilla, vinieron los médicos y echaron la puerta abajo, después de inyectarle tranquilizantes, indicaron que el hombre tenía fiebres, y se lo llevaron al hospital, y que no sabía nada más.
En vista de que parecía que el caso se iba al garete, Cornellius decidió que lo mejor era tratar de acceder a la casa y cobrarse los servicios prestados, al menos con un whisky que seguro que el viejo guardaba en alguna parte.... Tras un par de intentos, consiguió entrar en la habitación.
A hurtadillas fue revisando los estantes sin hacer ruido, tras unos veinte minutos dio con una botella de coñac, a la que dio un tiento, mientras se entretenía cotilleando los libros que tenía el viejo en las estanterías de la habitación que era la mayor parte del piso...hasta que dio con una factura de varios libros entre los que se encontraba el libro desaparecido. Parecía que había sido comprado en la librería Pitgilli...
Cornellius se quedó con la factura, y salió del estudio con su flamante botella de coñac.
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